Sáb. May 18th, 2024

“Hay una búsqueda de romper un poco el molde y salir del lugar en el que te ponen. Uno, a veces, se pone en lugares, pero, otras veces, lo ponen en lugares”. La frase de Gastón Soffritti es la conclusión acerca del rotundo cambio que logró en los últimos años. Pasó de ser una estrella infantil, que derivó en “galancito”, para convertirse en productor, director, realizador integral y hasta líder de una organización que nuclea a creativos de medios.

En una charla, Soffritti repasó parte de su presente muy cambiado en relación a lo que se conocía sobre él, pero también de su pasado. El actor que triunfó en Patito feo y Graduados aseguró que en la época en la que empezó a trabajar en televisión fue testigo de maltratos hacia menores en los sets de grabación.

Qué dijo Gastón Soffritti sobre los maltratos a menores en la televisión

Durante la conversación telefónica, se buscó saber si en la época en la que él empezó a trabajar había experimentado algunas situaciones de violencia laboral como denunciaron algunos protagonistas de recordados ciclos de Telefe como Cebollitas Chiquititas“¿Recordás haber vivido algún hecho de maltrato?”, preguntó este medio.

“Si. Vi maltratos a muchos compañeros míos y alguna vez me ha pasado a mí de estar en una situación incómoda. Había una época, en los 2000 cuando yo arranqué a laburar, en la que los roles de los directores eran mucho menos humanos, muchos menos empáticos con la persona o con un nene que tenías enfrente. El trato no era el mejor”, expresó.

Gastón Soffritti y Santi Talledo en "Patito Feo". (Foto: Ideas del Sur).
Gastón Soffritti y Santi Talledo en «Patito Feo». (Foto: Ideas del Sur).

Si bien Soffritti aclaró que había personas que sí eran buenas con los chicos, otras no. “Pasamos por situaciones que si yo lo veo siendo padre, no me lo bancaría ni en pedo. Pero bueno, no soy padre, entonces tampoco puedo opinar demasiado del tema”, remarcó.

Para el actor, en los últimos tiempos “cambió absolutamente” la relación entre el elenco y los realizadores, algo con lo que coinciden la mayoría de los artistas que se hicieron famosos cuando eran menores. En esa explicación, Soffritti dejó otro fuerte concepto.

“No tiene nada que ver con cómo se manejaba la tele antes. Era muy difícil llegar a la tele, muy complejo, entonces había como una especie de miedo de decir que no a cosas que, por ahí, no estaban tan bien. Terminabas diciendo que sí por ahí a situaciones que no estaban tan buenas”, remató.

Gastón Soffritti, de estrella infantil a productor integral

Según sus palabras, Gastón Soffritti cambió su manera de pensar el lugar que ocupaba en el medio cuando empezó a ver que quería hacer otras cosas y no se las ofrecían. Eso lo llevó a iniciar un proceso que derivó en su actual rol de productor de películas, director integral de ficciones y hasta presidente de la Asociación Civil de Trabajadores del Arte.

“Creo que siempre fui un poco así, más allá que desde hace muchos años me dediqué solo a actuar. Desde los 8 a los 23 solo fue actuación y música. En algún momento dije ‘yo puedo armarme mis propias cosas’ o no me llamaban para las cosas que yo quería y entonces empecé a meterme más en el atrás y autogestionarme”, detalló.

Para Soffritti todo se trata de “romper un poco el molde” y “salir del lugar en el que te ponen”. “Uno a veces se pone en lugares y otras veces lo ponen en lugares. Como que ‘vos sos actor y podés laburar de actor’. Creo que no es así. Esta generación patea un poco el tablero y hacemos varias cosas a la vez. Me entretengo así. Soy muy inquieto”, se definió.

Esa mirada diferente hacia lo que él pretendía lo llevó a armarse un curriculum variado casi como un gestionador integral de proyectos. “La mirada a la que yo apunto no es una dirección clásica de director de películas, sino más bien una dirección integral del armado de cosas. Por ejemplo ahora estoy con la creación de un canal de streaming propio”, comentó.

En ese sentido, Soffritti busca lanzar películas, ficciones y hasta obras de teatro. “Donde me gusta ponerme es en el rol de armador de equipos porque fui conociendo mucha gente muy talentosa durante muchos años en este medio. Voy llamando a esas personas como para poder cubrir cada uno de los puestos que se necesitan que yo fui aprendiendo que se necesitan. Ese es un poco el lugar que que quiero ocupar”, determinó.

De qué se trata ACTA, la organización que preside Gastón Soffritti

Junto a otros artistas como Peter Lanzani, por ejemplo, Soffritti fundó durante la pandemia la Asociación Civil de Trabajadores del Arte. La idea originaria era intentar hacer algo en esa época tan difícil para la ficción, pero que mutó en algo más. La organización terminó replanteándose qué es lo que se hizo mal para que la producción de contenido ficcional bajara tanto en los últimos 20 años, más allá de la coyuntura del COVID-19.

“Empezamos a estudiar un poquito qué era lo que pasaba. Cómo otros países de la región y del mundo crecieron muchísimo en materia audiovisual y la Argentina, que siempre fue pionera, no”, explicó.

Por esto, se plantearon hacer charlas y eventos que miren hacia el futuro, desde otro lugar. “La idea es poner a distintas personas que exponen sobre arte y tecnología en las diferentes materias y como la tecnología influye, todo intervenido por esa temática. Hay personas muy fuertes que saben mucho de la industria y que están atravesadas directamente por la tecnología”, agregó.

Este presente de Soffritti marcado por las múltiples facetas que va descubriendo de a poco está muy alejado de lo que le pasó hace 10 años, cuando estaba en pleno auge su participación en Graduados. Ese fue uno de los ciclos más exitosos en los que participó. Luego de ese programa, algunas sensaciones difíciles de manejar empezaron a aparecer sin que él lo pudiera controlar en una primera instancia.

“A los 21 años tuve ataques de pánico porque obviamente tenía todo el peso de haber laburado de chico. Me había tocado estar en proyectos muy exitosos y tenía mucho sube y baja emocional: un día eras Dios y al otro día no eras nadie. Complejo. Después de hacer Graduados, me asusté porque dije ‘esto fue una locura y, ¿ahora qué? ¿A dónde voy a ir a parar? También me había ido de mi casa, hacía poco tiempo que empezaba a vivir solo”, recordó.

Soffritti comentó que en ese momento se comenzaba a formar como la persona que es ahora, la que, en la actualidad, terminó de romper con el molde que un tercero había construido. “Empezaba a ser el Gastón que yo quería ser y no el que me habían dicho que tenía que ser”, cerró.