Sáb. Jun 29th, 2024

Nahir es uno de los últimos estrenos de Prime Video, con dirección de Hernán Guerschuny, la película se basa en el polémico caso Nahir Galarza, la mujer más joven en ser condenada a cadena perpetua en Argentina, por el asesinato de Fernando Pastorizzo, su novio.

La trama sigue la investigación y el juicio por el asesinato de Pastorizzo (interpretado por Simón Hempe), nombrado como Federico en la película, que tuvo lugar la noche del 29 de diciembre de 2017 en la ciudad de Gualeguaychú, Entre Ríos. Nahir (Valentina Zenere), su novia de ese momento, fue señalada como la principal sospechosa del caso. Tras entregarse, por pedido de su papá, y acompañada por su abogado, fue condenada a cadena perpetua por homicidio agravado.

La película, en un estilo true crime, desentraña los detalles de las tres líneas posibles de lo sucedido, siguiendo las declaraciones de Nahir durante la investigación y el juicio. La noche del asesinato de Fernando, va a la casa de Nahir, y en una discusión álgida, común para la pareja, toma el arma reglamentaria de su suegro policía, y se van juntos en la moto de él. La primera línea correspondiente a la declaración inicial de Nahir, relata cómo ella le hace dejar el arma de su padre, y posteriormente, sin que Fernando lo note, la agarra. Arma que guarda entre su ropa, y cuando va atrás en la moto, dispara por la espalda. La segunda declaración, ya durante juicio, desarrolla una línea en la que él lleva el arma encima cuando va manejando, y ella logra sacarsela y disparar. Avanzado el caso, ya con Nahir condenada, una nueva línea tiene lugar: la acusación hacia su padre, declarando que esa noche él los sigue con el auto, le saca su arma a Fernando, y lo asesina de dos tiros.

Durante 2018, el caso sacudió a la sociedad argentina y cobró gran notoriedad en los medios de comunicación, por la brutalidad del asesinato, y por la edad de los jóvenes implicados. Nahir Galarza tenía sólo 19 años al momento del crimen, y se convirtió en la primera mujer menor a 20 años condenada a prisión perpetua en el país.

La película dirigida por Guerschuny y guionado por Sofía Wilhelmi, está inspirada en el libro El silencio de Nahir, crónica de un linchamiento mediático, escrito por Jorge Zonzini. Nahir Galarza prestó su consentimiento para la realización del film, así como también para otros proyectos que se están produciendo sobre su historia. Mientras tanto, permanece recluida en la Unidad Penal 6 Concepción Arenal de Paraná.

Durante los 122 minutos que dura la película, se mantiene latente una pregunta, que es, quizás, la que sostiene la idea narrativa del film: ¿Cuál es la verdadera Nahir? Guerschuny logra componer una pieza interesante y entretenida, pero es difícil discernir si este mérito pertenece a quienes trabajaron en la película, o al interés y a la relevancia del caso en sí. Lo cierto es que la trama está anclada al punto de vista de Nahir, y los hechos que se desarrollan son solamente aquellos que tienen que ver con lo que ella va relatando y declarando desde que se entrega hasta después de ser condenada y acusar a su propio padre.

El mayor inconveniente es que aunque el foco esté totalmente puesto en ella y en su relato, no logramos conocer casi nada del personaje, como así tampoco, saber qué es mentira y qué es verdad. Hay un intento de explorar las complejidades de la relación conflictiva entre Nahir y Fernando y las situaciones violentas vividas entre ellos, pero estas escenas parecen no terminar de acoplarse al resto de la película, quedando un tanto colgadas.

Valentina Zenere logra una interpretación precisa, desde el look físico hasta la voz y la postura. Al final del film, se muestran unos archivos del juicio real, donde es posible comparar a Nahir, con el personaje de la película, y lo cierto es que resulta muy convincente la actuación de la joven Zenere, así como la de estos padres enigmáticos interpretados por César Bordón y Mónica Antonopolus, sobreprotectores y oscuros.

Si bien se trata de una película entretenida y de interés social por el ruido inmenso que ha generado el caso a lo largo de los años, la trama se vuelve inconsistente hacia adentro por una falta de profundización de la psicología de los personajes. El narrador oficia todo el tiempo de espectador, sin lograr sumergirse en lo que sucede realmente, como si se tratara de una concatenación de escenas aisladas y pegadas una al lado de la otra. Sería mucho más enriquecedora la experiencia cinematográfica si se ahondara en las complejidades emocionales y psíquicas de la protagonista, quién es, qué le sucede, cómo se siente, para poder reforzar la pregunta planteada desde el inicio: ¿Cuál es la verdadera Nahir?