Sáb. May 18th, 2024

Es inentendible la postulación para la Suprema Corte de Justicia de la Nación del cuestionado juez federal Ariel Lijo, un exponente de la “casta” judicial, por parte del gobierno de Javier Milei y que lo sostenga no obstante las numerosas criticas que se le formulan.

Milei cargó contra la “casta politica” durante la campaña electoral que lo llevó al Sillón de Rivadavia, entendiendo por casta a todos los estratos sociales que se sirven del corporativismo para aprovecharse de una serie de privilegios de manera encerrada y obscena. Una frase pronunciada por Milei, sintetiza este concepto: “Quiero darles las gracias a todos los que se fueron sumando durante el 2022 y así hemos logrado construir esta alternativa competitiva, que no solo dará fin al kirchnerismo sino que además dará fin a la casta política parasitaria, chorra e inútil que hay en este país”[i]. Pues bien, el juez Lijo es uno de los mayores exponentes de la “casta” judicial.

Son numerosas las instituciones vinculadas a la justicia que vienen advirtiendo la inconveniencia de que el cuestionado Juez, integre el más alto tribunal de la Nación.

Está cerrando ya el plazo de ley (15 días hábiles) para efectuar las impugnaciones, que se inició el 15 de abril, fecha de la publicación de su nominación en el Boletín Oficial

Entre otras impugnaciones se inscriben la de la Federación Argentina de Colegios de Abogados (FACA), que reúne a 83 colegios de todo el país; la de la organización Poder Ciudadano, y la del Instituto de Estudios Comparados en Ciencias Penales y Sociales (Inecip) que tras analizar cuidadosamente el desempeño de Lijo en registros públicos, afirma: “Es el juez más ineficaz de Comodoro Py”.


Ariel Lijo no cuenta con una trayectoria que justifique su mérito e idoneidad para integrar el máximo tribunal” señala el Instituto. Entre los numerosos antecedentes que exponen en la impugnación hay uno muy llamativo, “el juzgado de Lijo es el que tiene una mayor tasa de demoras en causas de corrupción” y concluye: «Se trata de un caso de especial gravedad institucional, ya que, por primera vez en la historia democrática reciente, un candidato acusado de mal desempeño como juez podría pasar a ocupar ese cargo en el Máximo Tribunal»,

Milei no puede equivocarse, insistir en asuntos que la sociedad condena lo hará perder imagen y adhesiones. Sobre el otro postulado, que recién podrá integrar la Corte, cuando se retire Juan Carlos Maqueda en diciembre, el abogado y decano de Derecho de la Universidad Austral, Manuel García-Mansilla, pesan también algunas impugnaciones, pero muchas adhesiones. 

 
Lo cierto es que la sociedad esperaba la postulación de una mujer para reemplazar el sillón vacante de Elena Highton de Nolasco. Parece que Milei prefiere una Corte Suprema integrada solo por hombres. Un extraño caso de Misoginia en lo más alto del poder en nuestro país.