El presidente de la Sociedad Rural Argentina (SRA) Nicolás Pino, acusó a la vicepresidenta Cristina Kirchner de «desconocer la realidad de la economía argentina» y, en particular, del sector agropecuario.
Según el dirigente, la ex mandataria «habla de la generación de dólares para pagar el endeudamiento y dice que »hay que ir por otro lado que la exportación de commodities»». Y lanzó: «Con solo mirar los números debería darse cuenta que el agro, en 2022, exportó por US$49.581 millones, generando divisas de manera genuina».
«Para pagar la deuda hace falta tener un gasto eficiente y equilibrado, cosa que no hace el Gobierno, que sigue gastando y no generando ahorro, asfixiando con los impuestos al sector privado» se quejó Pino.
Además, dijo que la titular del Senado «también habla de que el sector agropecuario genera poca mano de obra y mal remunerada. Pero el campo, de manera directa e indirecta, genera casi 4 millones de puestos de trabajo y los empleados rurales son unos de los pocos que, además de sus remuneraciones, tienen beneficios adicionales como casa, comida y movilidad».
«Hacen falta reglas claras y justas que generen estabilidad, para poder llegar con la competitividad de nuestros productos al mundo. La ideología no puede tapar la realidad», concluyó Pino.
Por su parte, Carlos Achetoni, presidente de Federación Agraria Argentina, señaló que la vicepresidenta «mostró históricamente un desconocimiento del sector productivo». «Los 130 días del conflicto por la 125, la calificación de ‘yuyo’ y otras descalificaciones. Es una postura política que le sirve de algún modo y no puedo comprender, son mentiras que nos desmerecen y nos descalifican».
Y cuestionó: «Su desconexión con nuestra realidad como pequeños y medianos productores no deja de dolernos. Es la vicepresidenta de la nación, aunque se quiera despegar de eso. Su manera de ver el mundo incide en la realidad. Con la gravísima crisis, el dólar por las nubes y la falta de perspectivas con los problemas irresueltos derivados de la emergencia que el gobierno decidió no atender, probablemente le sirve subirnos al ring y señalarnos como los malos».