Mar. Abr 23rd, 2024

La ministra de Salud Pública, Rossana Chahla, participó de la primera jornada de inmunización a personas con Diabetes tipo 1 que son insulinodependientes y tienen entre 18 y 60 años de edad. Además, adelantó que se pretende sumar a los pacientes con diabetes tipo 2.

“Una población joven que tiene conciencia nos dio una lección de solidaridad, Sofía nos dijo recién cómo ha vivido este año de pandemia, sin ver a sus amigas que las extraña y las quiere, cuidándose ella y su familia. Esto es lo que tenemos que hacer todos, este es el mejor ejemplo que podemos dar, es lo que ella ha sentido y pasado durante un año. Fue muy clara en sus conceptos y creo que esas son las palabras que valen, más que las acciones o lo que digamos nosotros que estamos conduciendo esta cartera sanitaria.

Quiero agradecerle por su responsabilidad, por su empatía con el otro, ella dijo que se cuidó para no contagiar a nadie porque sabía que era más susceptible”, empezó contando a la prensa la titular de la cartera sanitaria, luego de la experiencia en primera persona de Sofía, una paciente con diabetes tipo 1.

Y continuó: “Quiero decirles a todos los pacientes jóvenes, menores de 60 años que entran en esta primera etapa, que no se cansen de seguir cuidándose, porque sabemos que el control, los cuidados, los estudios, es un trabajo más como decía ella. Quiero agradecerle porque trasmitir esto a los demás, da fuerza y ganas de seguir en este camino”.

Asimismo, resaltó que las políticas públicas sanitarias van cambiando de acuerdo a la evolución de la pandemia pero es vital que la sociedad en conjunto siga cumpliendo con los protocolos, como así también las instituciones que presentaron protocolos fantásticos y muy bien escritos, pero lo más importante es no dejar de cumplirlos.

“En todas partes del mundo vino la segunda ola después de las vacaciones, y estamos viendo el aumento de los casos con gran preocupación pero también con acciones, no tan sólo la vacuna que es la mejor prevención, sino con acciones en sanidad de fronteras, fortaleciendo la búsqueda activa de pacientes sintomáticos, en las guardias de febriles atendiendo mucha cantidad de personas, y también en la internación. Necesitamos de la gente, de la solidaridad de todos, del esfuerzo en común, de poder cuidar al otro y pensar en no perder más seres queridos. Queremos que esta segunda ola transite de la mejor manera posible”, subrayó la funcionaria.

Respecto a la inmunización de los pacientes con diabetes, explicó que desde hoy comenzaron a inocular contra el COVID-19 a las personas con diagnóstico de diabetes tipo 1, insulinodependientes, es decir aquellos que se inyectan, y que tienen entre 18 y 60 años de edad.

“Ahora estamos ampliando a pacientes diabéticos tipo 2, menores de 60 años. Ya durante la semana también vamos a empezar en adultos mayores de 60 años insulinodependientes, es decir cualquier persona diabética que se inyecte insulina va a poder acceder a la vacuna en esta semana”, sostuvo.

Por su parte, la referente del Programa de Diabetes, Cristina du Plessis, comentó: “Es algo muy esperado realmente y hoy se da comienzo a la vacunación de personas con diabetes tipo 1. Esta enfermedad es una patología autoinmune que se genera por la destrucción de las células que producen la insulina que son las células beta y progresivamente va decayendo su secreción hasta que necesita sí o sí de la insulina exógena para vivir. Esta diabetes se presenta generalmente en niños y adolescentes, pero también hay adultos con diabetes tipo 1 que se conoce con otro nombre: diabetes lada”.

Y añadió: “Por gestión ministerial prontamente ingresarán las personas con diabetes tipo 2, que requieren insulina para controlar su enfermedad. Y eso realmente es una muy buena noticia porque allí abarcaríamos una gran población de personas con diabetes que necesitan a lo largo de su vida por la evolución de su enfermedad, insulina para controlar los niveles de glucemia. Es muy importante esta inmunización porque constituye un grupo de alto riesgo para desarrollar formas graves de COVID-19; son personas que en realidad no tienen un riesgo superior de contagio porque son muy cuidadosas y cumplen muy bien los protocolos, pero si se contagian tienen la posibilidad de tener formas graves”.

Finalmente, el jefe de médicos centinelas del Siprosa, José María Mansilla, adelantó que tienen como expectativa llegar a las 500 aplicaciones por turno de vacunación, siempre y cuando el tiempo acompañe.

“Lo previsto es que lleguemos a las 6000 vacunas en el transcurso de la semana. Esto depende de la documentación de las obras sociales, de la cantidad de pacientes empadronados en programa de diabetes para que así nosotros vayamos progresando en la activación de estos pacientes. Otra modalidad que tiene previsto este lugar es la modalidad de Autovac que por condiciones climáticas hoy no pudimos lanzar, pero en la medida en que la demanda vaya aumentando vamos a poder incorporar la modalidad Autovac como se hizo en la Dirección de Emergencias”, expuso.

Recordó que quienes entren en este grupo deben anotarse en la web (https://vacunartuc.gob.ar/): “Hay una opción para los pacientes del subsector público de salud; en el caso del subsector privado, tienen que acercar la nómina a la obra social o la obra social es quien es responsable de nominalizarlo y enviar el expediente para que nosotros procedamos a la activación según corresponda dentro del rango de edad y de la caracterización de paciente insulinodependiente”.

En primera persona

Sofía, 29 años, tucumana con diabetes tipo 1 desde los 24 años: “Hace seis años padezco y no esta enfermedad porque hay enfermedades peores. Ser insulinodependiente no te limita a nada pero sí requiere otros cuidados que otras personas no lo tienen y por ahí una enfermedad muy silenciosa que si no te cuidas, podes tener a largo plazo otros inconvenientes. La verdad que estoy muy contenta de que el Ministerio de Salud haya elegido a los insulinodependientes para poder vacunarse. Sé que hay otras patologías graves también, pero a todos nos va a llegar. La organización perfecta, estoy convencida de que la Salud Pública es lo mejor que nos puede pasar en la Argentina y gracias al Ministerio hoy estamos vacunados”.

Eduardo Rubén Domínguez, 36 años, insulinodependiente desde los 11 años de edad: “Me inscribí en la página del gobierno, me avisaron mis familiares y me anoté. Tranquilidad sí hay, el único miedo es que no tenga ningún efecto adverso el tema de la vacuna, pero dentro de todo tranquilo por razones obvias de lo que provoca la vacuna, saber que de tener la enfermedad no voy a pasar un mal momento. Muy organizados hoy, la atención es excelente, muy amable el personal médico, los enfermeros. Afuera pienso que debería haber más control porque la gente no entiende, no toma mucha distancia, se desvían del orden; ese es el único detalle pero dentro del hipódromo están muy bien organizados”.