Es un milagro. Un rayo cayó sobre el complejo petroquímico de la empresa en Puertollano, España e incendió dos depósitos.
El reporte policial señala las 9.46 como el momento de la explosión, en medio de una tormenta incipiente.
Ocho vehículos de bomberos, dos bombas de alta capacidad y varios vehículos portátiles de extinción de incendios pudieron controlarlo, no se registraron graves daños y según Repsol, «no ha existido peligro para la población».