El economista y asesor extraoficial de Javier Milei, Federico Sturzenegger, identificó en la corporación empresaria, el sindicalismo y el peronismo al «triangulo de las Bermudas» que hay que desarmar y los acusó de ser «agentes bloqueantes del cambio». El economista también habló sobre la dolarización y su futuro rol como ministro.
Al disertar en el cierre de la primera jornada del Foro «Renacer de la libertad en Argentina y el mundo», que organiza la Fundación Libertad y Progreso, el ex presidente del Banco Central dijo en consecuencia que el problema «no es de hace cien años, sino que nuestra generación es la responsable de la debacle».
El asesor presidencial criticó «la voluntad del regulador de reducir el riesgo» y manifestó que «hay que animarse a tomar un poquito más de riesgo».
Federico Sturzenegger pidió desarmar la tríada de la «corporación empresaria, la corporación sindical y el Partido Peronista»
Al caracterizar los intereses que, a su juicio, impiden el crecimiento económico, identificó a los tres vértices de lo que denominó «el triángulo de las Bermudas de la Argentina» y que son «la corporación empresaria, la corporación sindical y el Partido Peronista, con sus distintos nombres y distintas pieles».
«El peronismo es el gestor de las castas, el verdadero partido conservador de la Argentina», exclamó, en uno de los pasajes de su alocución más aplaudidos por la concurrencia.
Para desactivar ese «triángulo», Sturzenegger instó a «desarmar el poder de los agentes bloqueantes del cambio» e identificó dos factores: «Para la corporación empresaria es la competencia y para la sindical, las cajas», al tiempo que aseguró que en el exterior «no entienden cómo en la Argentina el sindicalismo se lleva entre el 3% y el 3,5% de los salarios formales».
Pese a reconocer las dificultades, rescató que en la década del ´90 «se consiguió desactivar la casta militar y (el expresidente Carlos) Menem lo hizo eliminando la conscripción, con lo que los desfinanció de soldados y dejaron de ser un factor importante en la puja de poder».
«Es una tarea ardua», admitió, y rescató lo que consideró «una experiencia democrática inédita» que está viviendo la Argentina, en la que «el presidente se enoja con el Congreso y eso es una señal de vitalidad del sistema, lo tenemos que ver como una fortaleza».
En otro momento de la noche, el economista fue consultado por la demora en la implementación de la dolarización, el «caballito de batalla» del presidente Milei durante la campaña electoral como propuesta para eliminar la inflación. Sin embargo, Sturzenegger evitó dar una respuesta: Yo no contesto preguntas de la macro. Los temas macro son para el ministro (Luis Caputo). En este Gobierno hago temas de desregulación, en eso me pidió ayuda Milei», dijo.