Mié. Jul 3rd, 2024

La hora de dejar el chupete definitivamente es un poco triste para muchos padres: se trata de una prueba más del paso del tiempo; el bebé está dejando de serlo.

Sin embargo, todos sabemos que, de acuerdo a los que dicen los pediatras, tenemos que decir adiós al chupete en algún momento. Y dejarlo es un proceso en el que los padres debemos acompañar al niño para que esté lo más tranquilo posible y no sea traumático para él, pues es posible que no entienda mucho por qué debe dejarlo de utilizar.

La Asociación Española de Pediatría recomienda comenzar la retirada del chupete cuando llega el año, pues a partir de esta edad se reduce considerablemente el riesgo de muerte súbita del lactante.

Como decimos, la retirada del chupete es un momento triste y angustioso, pues los padres, a menudo, no sabemos bien cómo actuar. Y esa falta de conocimiento puede hacernos caer en ciertos errores que más que ayudar, retrasan el momento final.

Errores en la retirada del chupete: ¡cuidado!

El niño necesita de nuestra ayuda para dejar de utilizar el chupete, pero nosotros necesitamos mucho tacto para que la retirada sea un éxito y para que el peque se sienta respetado en el proceso.

Decir ‘se lo ha llevado la cigüeña’ o los Reyes Magos

Esconder el chupete y no volver a dárselo nunca puede provocar en el niño un problema, pues es un objeto con el que sienten una relación de apego (les ha ayudado a calmarse durante mucho tiempo).

Otra cosa diferente es lo que argumenta la pediatra Lucía Galán y que tiene que ver con esto: organizar una fiesta alrededor de la ‘despedida al chupete’ en la que compréis un globo de helio donde lo ataréis y, juntos, lo echaréis a volar mientras decís adiós a este objeto tan preciado. “Cuando se le pase la emoción y pida el chupete, recordadle esa escena, la fiesta que hicisteis y que ya no podrán volver los chupetes del cielo”, explica.

Ser demasiado firme con la decisión

Ya la propia Asociación Española de Pediatría recomienda preparar primero el terreno de la retirada y luego ir poco a poco: de hecho, habrá niños que dejen de usarlo durante el día pero que sigan necesitándolo durante la noche, por ejemplo. “primero lo retiraremos durante el día, luego probaremos a la hora de la siesta y, finalmente, por la noche que es el momento más difícil”, explica la pediatra Anna Estapé en su página web.

Coser hilos o meterlo en vinagre

Una técnica que muchos padres utilizan (que de hecho se está haciendo viral en TikTok) es la de coser hilos a la tetina del chupete o, incluso, mojarlo en vinagre. Todas con el mismo objetivo: intentar que al niño le dé asco y deje de utilizarlo. “No recomiendo técnicas que considero poco respetuosas con el niño”, asegura la pediatra Anna Estapé. “Hay que tener en cuenta que les ha ayudado mucho, habrá que respetar sus tiempos”, continúa en su web.

No quitárselo hasta que él decida

Otro de los errores que muchos padres cometen, ante un ‘miedo’ a la posible reacción del pequeño (que no sepa estar sin él, por ejemplo). Sin embargo, ya la AEP dice que a partir de los tres años los niños no deberían utilizar el chupete en ningún momento, pues puede provocar problemas de mordida o de posición en los dientes. Igualmente, el pediatra Gabi Ruiz asegura que puede afectar al lenguaje: “Dificulta la pronunciación a una edad en que es importante la adquisición de una correcta fonación”.

Seguir ofreciéndolo

Igual que debemos ser comprensivos y entender si está o no preparado para retirarlo definitivamente, tenemos que ser firmes con la decisión. Si hemos decidido comenzar con la retirada, el primer paso será dejar de ofrecerlo cuando el niño llore o cuando lo reclame. En su lugar se pueden utilizar los abrazos, las caricias o, incluso, algún peluche en el que pueda buscar ese ‘cobijo’ que le daba el chupete.

Si te pregunta porqué ya no lo puede usar, se le puede explicar con cariño y paciencia el motivo por el que no es bueno.